Monterrey: Cerro de la Campana Tendrá Agua potable en Casas
Tras décadas de depender de tomas colectivas, los habitantes de la colonia Cerro de la Campana en Monterrey están más cerca de contar con agua potable directamente en sus hogares. El municipio de Monterrey ha informado que la primera etapa del proyecto de instalación de la red de agua potable ha alcanzado un avance del 60%. Este logro marca un hito en la calidad de vida de una comunidad que, durante años, tuvo que enfrentar las limitaciones de un suministro colectivo ineficiente.
El proyecto, supervisado por la Secretaría de Infraestructura Sostenible, no solo garantizará un acceso más justo y eficiente al agua, sino que también busca establecer un servicio duradero y sostenible mediante la instalación de tuberías metálicas de alta calidad. Esta obra se suma a los esfuerzos del gobierno local por atender necesidades básicas en zonas vulnerables y mejorar las condiciones de vida de sus habitantes.
Avances en la red de agua potable
El municipio informó que la red de agua potable del Cerro de la Campana está diseñada para que cada lote cuente con una toma individual y su respectivo medidor. Este enfoque permite a las familias gestionar su consumo y asegura una distribución más equitativa. Hasta el momento, los trabajos han avanzado de manera significativa en el sector 2 de la colonia, y se espera que esta primera etapa concluya en los próximos meses.
El proyecto enfrenta retos técnicos debido a las características del terreno, como pendientes pronunciadas y accesos limitados. A pesar de estas dificultades, los ingenieros han implementado soluciones innovadoras, incluyendo el uso de cuerdas y el transporte manual de materiales. Estas medidas han permitido avanzar de manera constante, priorizando la seguridad y la calidad en la ejecución de la obra.
La elección de tuberías metálicas es clave para garantizar la durabilidad del sistema y minimizar la necesidad de mantenimiento a largo plazo. Este material, aunque más complejo de instalar en terrenos difíciles, ofrece una solución eficiente para las condiciones específicas del Cerro de la Campana, donde las condiciones climáticas y geográficas representan un desafío.
Transformación histórica para los vecinos
El impacto de esta obra va más allá de la instalación de una red de agua potable. Para los habitantes del Cerro de la Campana, representa un cambio significativo en su calidad de vida y dignidad. Durante años, las tomas colectivas fueron una solución temporal que generó problemas de distribución, conflictos entre vecinos y altos costos adicionales. Ahora, con tomas individuales, cada familia podrá disfrutar de un servicio confiable y eficiente.
“Llevo más de 20 años viviendo aquí, y siempre hemos tenido que compartir el agua con otras casas. Esto no solo generaba problemas, sino que muchas veces nos quedábamos sin agua cuando más la necesitábamos. Ver que por fin están haciendo algo por nosotros es una alegría enorme”, compartió una vecina del sector 2.
El proyecto también busca fomentar una cultura de consumo responsable. Con los medidores, los vecinos podrán monitorear su uso de agua, promoviendo la sostenibilidad del recurso. Además, se espera que este tipo de infraestructura moderna motive a otras colonias a exigir mejoras similares en sus comunidades.
El gobierno municipal ha señalado que esta obra es solo el comienzo de una serie de iniciativas destinadas a reducir la desigualdad en los servicios básicos en Monterrey. Se espera que, tras la conclusión de este proyecto, se evalúen otras necesidades de infraestructura en la colonia, como la pavimentación de calles y la mejora del alumbrado público.
Esfuerzo conjunto por un servicio sostenible
La introducción de agua potable en el Cerro de la Campana no habría sido posible sin el esfuerzo coordinado entre las autoridades municipales, los ingenieros encargados y la comunidad. Aunque los retos geográficos han alargado los tiempos de ejecución, el compromiso con la calidad y la durabilidad del sistema ha prevalecido.
La Secretaría de Infraestructura Sostenible ha destacado que este proyecto es un ejemplo de cómo las obras públicas pueden transformarse en soluciones integrales. Además de garantizar un servicio de agua potable, se está trabajando para minimizar el impacto ambiental y asegurar que los materiales utilizados cumplan con los estándares más altos.
Por otro lado, los vecinos han desempeñado un papel crucial al colaborar con las autoridades, permitiendo el acceso a sus propiedades y participando activamente en la supervisión de los trabajos. Este diálogo constante entre comunidad y gobierno ha sido fundamental para identificar y resolver problemas rápidamente, asegurando el progreso del proyecto.
El municipio de Monterrey reafirma su compromiso de continuar impulsando iniciativas que beneficien a las comunidades más vulnerables. Obras como esta no solo garantizan acceso a servicios básicos, sino que también generan un impacto positivo en la calidad de vida y el desarrollo social de los ciudadanos.